La siesta tiene muchos beneficios para la salud

Con tantas actividades, muchos batallamos para dormir lo suficiente profundamente. Una excelente manera de relajarnos para aumentar el estado de alerta y el ánimo durante el día es a través de la siesta.

¡A continuación aprende los increíbles beneficios de salud que vienen con la siesta y cómo integrar una en tu rutina!

Beneficios de la siesta

La siesta tiene mala fama. Muchas personas la asocian con alguien improductivo o perezoso. Actualmente sabemos que es todo lo opuesto. Una siesta es como un reinicio para tu cerebro. Es una parte necesaria del bienestar mental y físico, que brinda un poder renovado para pensar con claridad, trabajar eficientemente y sentirse bien. Algunos de los principales beneficios de la siesta incluyen:

Impulsa el sistema inmunológico: El sueño es una parte integral de cómo el cuerpo se repara a sí mismo, limpia las toxinas y rejuvenece. Incluso las siestas de 30 minutos o menos pueden ayudar a estimular el sistema inmunológico.

Aumenta la resistencia física: La debilidad y la fatiga son signos de sueño inadecuado y agotamiento. Estudios demuestran que las personas se sienten físicamente más fuertes y motivadas para hacer ejercicio después de una buena siesta.

Reduce el estrés: El sueño ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, por eso es tan importante dormir 7-9 horas por noche. Pero nuestros días están cargados con mucha más información y expectativas que nunca. Por la noche esto puede ocasionar problemas para conciliar el sueño o para permanecer dormido, y puede mantenernos en un estado constante de estrés. Una o dos siestas a lo largo del día pueden ayudar a reponer el sueño perdido en la noche, proporcionando una liberación muy necesaria de estrés y preocupación.

Ayuda en la pérdida de peso: Numerosos estudios han relacionado la falta de sueño con el aumento de peso. Cuando estamos privados de sueño, nuestros cuerpos tienden a desear carbohidratos azucarados o procesados ​​que nos darán rápidos arrebatos de energía para permanecer despiertos. Esto puede manifestarse como antojos de comida chatarra durante el día. Antes de comer un bocadillo considera la posibilidad que simplemente necesites una breve siesta.

Aumenta el estado de alerta y la productividad: Un típico día puede ser mental y físicamente agotador, incluso si contó con una buena noche de sueño. Nuestras mentes atraviesan picos y depresiones naturales a lo largo de nuestras horas de vigilia. En lugar de tratar de avanzar por un bajón con el cerebro borroso y distraído, tómate una breve siesta. Te despertarás más alerto y productivo, listo para enfrentarte a cualquier cosa en la que estuvieras trabajando antes de tu sueño.

Cómo tomar una siesta productiva

Entonces, ¿cómo deberías tomar una siesta? Esto es lo que debes saber antes de tomar una siesta productiva para refrescar tu mente:

• La clave es mantener la siesta corta; 15 a 20 minutos es lo ideal para reforzar la energía y aumentar el estado de alerta.
• Pon una alarma. Si te toma tiempo quedarte dormido, tómalo en cuenta para configurar la alarma (es decir, 35 minutos si quedarte dormido te toma 15 minutos).
• Una siesta demasiado larga puede causar cansancio o debilidad.
• Los beneficios de una siesta pueden durar varias horas después.
• Una siesta durante la hora posterior al almuerzo, generalmente alrededor de la 1:30 o 2 p.m., puede mejorar significativamente la forma en que trabajas durante el resto del día.
• Para una buena siesta, recuéstate en un lugar tranquilo, fresco y oscuro, sin ningún ruido o distracción. También es posible que desees utilizar una máscara para dormir y/o tapones para los oídos.
• Determina qué tipo de siesta te conviene más y luego practícala en para obtener mejores resultados.

 

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